Año tras año la Biblioteca participa en la formación
docente de nuestros futuros bibliotecarios facilitando un espacio para la construcción
de experiencias significativas y variadas de aprendizaje de nuestros próximos
profesionales, tratando de asumir un rol activo de manera que el paso de estos
alumnos resignifique y retroalimente la propia práctica y saberes del equipo
docente de la biblioteca, al mismo tiempo que facilite la construcción de
saberes para la inserción e intervención pedagógica en diferentes ámbitos y
contextos de dichos alumnos.
Desde esta institución se considera relevante y
vital la articulación entre los institutos de formación y las bibliotecas como mecanismo clave para la
formación de estos nuevos docentes creando los espacios necesarios para el acompañamiento de esta instancia de trayecto
formativo en la carrera del bibliotecario, tanto de alumnos practicantes como
residentes, que le permitirán construir su identidad y formación docente,
alentando la responsabilidad individual de los alumnos por su propia practica pedagógica
.
“Es necesario fortalecer a las escuelas que reciben a los practicantes y residentes para que puedan desarrollar una cultura de la formación, que haga posible que la escuela se piense a sí misma como una institución que no solo forma alumnos, sino que también forma docentes. Esto implica, evidentemente, un profundo cambio en la cultura profesional de los maestros y profesores, y también en la de los formadores; cambio que no puede establecerse por definición normativa, sino que requiere iniciativas concretas que contribuyan a su desarrollo.”(1)
1- Ministerio
de Educación Ciencia y Tecnología. INFOD “Hacia un Acuerdo sobre la
Institucionalidad del Sistema de Formación Docente
en Argentina”. Pág.: 45